jueves, 14 de enero de 2010

No me traigas a ciegas


Si pudiera llegar al limite,
y garantizarte una fuerza divina,
librarte de tus posesiones,
cambiar tu gracioso san valentín.


No te vayas no me dejes,
pero no me traigas a ciegas,
no te vayas no me dejes,
pero no me traigas a ciegas.

Si pudiera encontrar el límite,
sé que lo he intentado,
cada aliento tendría sentido,
por lo menos lograrías tener claridad.
Sé que no me crees,
nos seguimos hiriendo más,
no me traigas a ciegas,
no me traigas a ciegas,
sé que estas rota,

Pero al encontrar ese lugar,
nos congelará el tiempo,
y encontraré una forma diferente de ver las cosas,
tus ojos y los mios en una mirada,
y la venda se desvanecerá...

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